La eléctrica alemana RWE (DE:RWEG_p) inició este jueves un caso de arbitraje internacional para exigir una compensación al Gobierno neerlandés por los efectos de la prohibición del uso de carbón a partir de 2030 en Países Bajos, donde tiene una central de energía que podrá sufrir 1.400 millones de euros en pérdidas, lo que ha causado polémica en La Haya.