Tratado sobre la Carta de la Energía

El Tratado sobre la Carta de la Energía (TCE) es un acuerdo plurilateral de inversión entre 53 países de Europa y Asia central. Se firmó en 1994 y entró en vigor en abril de 1998.

Unos 30 países en todo el mundo se encuentran en diferentes etapas de unirse al TCE. Burundi, Eswatini (antes Swazilandia) y Mauritania son los primeros en la lista, seguidos por Pakistán y Uganda.

El objetivo original del TCE era superar las divisiones políticas y económicas entre Europa oriental y occidental tras la desaparición de la Unión Soviética, así como fortalecer la seguridad energética de Europa. Los países europeos buscaban asegurar el acceso a los recursos de combustibles fósiles de los países de la antigua Unión Soviética protegiendo las inversiones extranjeras en energía en tales países.

El TCE prevé un mecanismo de solución de controversias entre inversionistas y Estados (ISDS por sus siglas en inglés) para resolver las controversias entre un inversionista y un Estado miembro. Hasta el día de hoy, es el instrumento legal más utilizado en el mundo para iniciar arbitrajes ISDS y fue invocado por los inversionistas en 124 casos. Los críticos sostienen que, como en la mayoría de los demás acuerdos de inversión, coloca los derechos e intereses económicos de los inversionistas por encima de los intereses sociales, ecológicos y económicos de los Estados anfitriones y sus sociedades. El TCE impone obligaciones al Estado receptor pero no a los inversionistas extranjeros. El tratado también ha sido condenado por activistas ambientales por proteger a la industria de los combustibles fósiles y socavar graves medidas sobre el clima.

España ha sido sometida 45 veces a controversias de arbitraje en el marco del TCE tras aplicar una serie de reformas energéticas que afectan al sector de las energías renovables, incluida una reducción de las subvenciones a los productores. Aunque algunos casos siguen pendientes, España ya fue condenada a pagar más de 800 millones de euros.

Más información sobre el Tratado de la Carta de la Energía en el sitio web "ECT’s dirty secrets".

Entre los casos clave se incluyen:

  • Vattenfall (Suecia) vs. Alemania: En 2007, la corporación energética sueca obtuvo un permiso provisional para construir una central eléctrica de carbón cerca de Hamburgo. En un esfuerzo por proteger el río Elba de las aguas residuales vertidas por la planta, se añadieron restricciones ambientales antes de la aprobación final de su construcción. El inversionista inició una disputa, y argumentó que esto haría el proyecto inviable. El caso se resolvió finalmente en 2011, y Hamburgo terminó aceptando la reducción de los estándares ambientales.
  • Yukos (Isla de Man) vs. Rusia: Yukos era una empresa rusa de petróleo y gas. Se la compraron al gobierno ruso durante las controvertidas subastas de “préstamos por acciones de bolsa” de mediados de la década de los 90, en las que algunos de los mayores activos industriales del Estado fueron puestos en arrendamiento (en efecto privatizados) mediante subastas con dinero que prestaron al gobierno los bancos comerciales. Las subastas estaban amañadas y carecían de competencia, y se convirtieron efectivamente en una forma de venta a un precio muy bajo. En 2003, el director general de Yukos fue arrestado bajo cargos de fraude y evasión fiscal y al año siguiente los activos de Yukos fueron congelados o confiscados. En 2007 los antiguos accionistas de Yukos presentaron una demanda por más de 100 mil millones de dólares estadunidenses, solicitando ser indemnizados por su expropiación. La disputa dio lugar a que en 2014 los árbitros otorgaran a los accionistas mayoritarios más de 50 mil millones de dólares por concepto de daños y perjuicios. Desde entonces, los inversores han tratado de hacer cumplir el laudo en varios países.
  • NextEra (Países Bajos) contra España: El inversionista holandés presentó una demanda de arbitraje en mayo de 2014, después que España cambiara el marco reglamentario aplicable a su inversión, a saber, la construcción de dos centrales de energía solar. NextEra alegó que España abolió el sistema de primas y aranceles a largo plazo, lo que afectó negativamente la rentabilidad del proyecto.
    España alegó que NextEra debería haber sido consciente de que se podían hacer cambios en el régimen normativo. En mayo de 2019, el inversionista recibió alrededor de 290 millones de euros. En octubre de 2019, España solicitó que se anulara la demanda.

Foto: Marc Maes / Twitter

Última actualización: abril de 2020

SeeNews | 11-abr-2019
EVN and Bulgaria reached an out-of-court settlement, under which part of the claims regarding the remuneration obligations for renewable energy were offset between a Bulgarian EVN subsidiary and the Bulgarian state-owned National Electricity Company.
TASS | 15-mar-2019
A Berlin court has ordered former shareholders of Hally’s Parsons Green, linked to now defunct oil company Yukos, to compensate Russia its legal costs to the tune of 188,000 euros.
Renewables Now | 15-mar-2019
The ICSID ruled against Spain in a case brought by NextEra Energy Inc regarding the US utility’s lost investments in two 49.9-MW concentrated solar power plants.
Kluwer Arbitration Blog | 14-mar-2019
The ongoing Rockhopper case may become a benchmark for future cases on the horizon, following Italy’s decision to crack down on hydrocarbon explorations and extractions.
Total Croatia News | 7-feb-2019
Arbitration proceedings which the Hungarian energy group MOL has launched against Croatia before the ICSID in Washington are still ongoing and a ruling is pending, and Croatia has contested the jurisdiction of the arbitration tribunal.
Kluwer Arbitration Blog | 29-ene-2019
It would be a brave person who would gamble on the CJEU not extending its Achmea reasoning to the ECT. Perhaps the time for obituaries is not yet nigh, but the headstone is already being carved.
New Europe | 18-ene-2019
22 of the 28 EU nations have committed to terminate their bilateral investment treaties and use their influence as home states and respondent-states to notify tribunals of the non-arbitrability of intra-EU bilateral investment treaties and Energy Charter Treaty claims.
Kluwer Arbitration Blog | 14-dic-2018
Tribunals still grappling with the intra-EU question, especially those in ECT cases, are certain to pay great attention to the carefully crafted Vattenfall decision. Its reasoning may well serve as a blueprint for further decisions and awards in similar cases.
Globe Newswire | 16-nov-2018
The net award for Athena Investments amounts to approx. EUR 11M.
Business Review | 13-nov-2018
The Romanian government has won a trial at World Bank’s International Centre for Settlement of Investment Disputes against the Swiss-based energy trader Alpiq in a case related to Hidroelectrica insolvency procedure.