El CETA entra en vigor sin zanjar sus partes más polémicas

El CETA entra en vigor sin zanjar sus partes más polémicas

Por La Vanguardia | 21-10-17

El CETA, el acuerdo de libre comercio entre la Unión Europea y Canadá, ya se aplica este jueves de forma provisional, a la espera de que todos los países del bloque ratifiquen las disposiciones que afectan a las competencias nacionales, como la más polémica, que prevé la creación de un tribunal de inversiones.

El acuerdo comercial fue firmado el pasado 30 de octubre en Bruselas en una cumbre a la que asistió el primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, pero antes fue necesario pactar una declaración "aclaratoria" adjunta al tratado que atiende a las preocupaciones expresadas por algunos Estados miembros.

Pendiente de ratificaciones

La región belga de Valonia amagó con vetar la aprobación del CETA por parte de Bélgica a nivel europeo y puso como una de las condiciones para retirar sus reservas que el tratado, de 1.500 páginas, se sometiera al dictamen del Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TUE).

De hecho, el Gobierno belga ejecutó este derecho a principios de septiembre y pidió al tribunal con sede en Luxemburgo un dictamen que aclare si el CETA "es compatible con los Tratados de la UE, en lo que afecta a los derechos fundamentales".

En todo caso, tanto la UE como Canadá han alabado los beneficios que a su juicio supone este tratado de libre comercio. El presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, ha destacado en un comunicado que es "un instrumento para el crecimiento" que "beneficia a las empresas y los ciudadanos de Europa", así como una herramienta para "proyectar los valores" de la UE, "encauzar la globalización y configurar las normas del comercio mundial".

Desde este jueves se aplicará el 98% del pacto de libre comercio, a la espera de que todos los Estados miembros completen los procedimientos nacionales de ratificación. Hasta ahora sólo lo han hecho Letonia, Dinamarca, España, Croacia, Malta y Portugal.

Ecología y empleo en la mira

Otras críticas llegan desde asociaciones y organizaciones. La ecologista Greenpeace afirma que Canadá tiene estándares de seguridad y etiquetado de alimentos “más débil” que el de la UE, y lamentó que su agricultura “dependa más” de pesticidas y cultivos modificados genéticamente, a pesar de que las autoridades europeas han insistido en que sus normativas al respecto no se verán comprometidas por el acuerdo.

En paralelo, la Confederación Europea de Sindicatos(CES) aseguró que el texto final del CETA “no está completamente en línea con nuestras expectativas”, especialmente en lo que se refiere a servicios públicos, protección de las inversiones y derechos laborales.

La importancia para España

Según datos del Ejecutivo comunitario, un total de 5.449 empresas españolas exportan a Canadá, de las que un 91% son pymes. Los principales productos que se exportan son fruta, carne de cerdo, vino, vinagre, pimientos y componentes de ascensores y aviones, entre otros. Es el vigésimo socio comercial de España, con unas exportaciones valoradas en 1.400 millones de euros y unas exportaciones de 900 millones.

source: La Vanguardia